Literatura

LOS CIEN AÑOS DE JOSÉ LEZAMA LIMA

El 19 de diciembre de 1910 nació el escritor cubano José Lezama Lima. Primordialmente poeta, dirigió varias revistas de poesía, escribió ensayos y su novela Paradiso alcanzó gran repercusión. Semblanza del poeta, en fragmentos de El misterio de la amistad, el disfrute de la palabra, texto de Cintio Vitier publicado en el semanario El Periodista, nº 119 del 19 de diciembre de 1987.

   “José Lezama Lima recibió el triunfo de la revolución con profunda alegría. Recuerdo que en enero del 59 nos dijo, refiriéndose a los primeros discursos de Fidel, que lo más le impresionaba era cómo decía la palabra patria.
   Me parece que lo estoy oyendo repetir, con aquel deleite suyo ante las expresiones que lo satisfacían, pero en este caso con un evidente orgullo cubano: 'Nunca habíamos oído decir la patria como lo dice este muchacho, abriendo mucho las aes, subrayando la erre y deteniendo y como paladeando la palabra'.
   También nos dijo de viva voz, una noche, en el restaurante Daytona, alguna de las cosas que escribió sobre la revolución en A partir de la poesía y que yo recogí en De pena pobre, cuando el maestro le dice a Kuntius por teléfono: 'Parece que el anillo caído en el estanque, como en las antiguas mitologías, ha sido reencontrado... Que todos los conjuros negativos van a ser decapitados... De las virtudes irradiantes de la pobreza, como siempre hemos pensado, tiene que venir la salvación...'
   Ese estado de ánimo conmovido y exultante que nos invadió desde el 1º de enero de 1959 sólo fue turbado y amargado por la campaña desatada contra nosotros en (suplemento cultural del órgano oficial del Movimiento 26 de julio), dirigido por Guillermo Cabrera Infante, cuyo visceral resentimiento descubrimos mucho antes del triunfo, la noche del homenaje a Claudel en el Lyceum.
   Quizás el que más se distinguió en aquella sistemática campaña fue Heberto Padilla, quien escribió verdaderas groserías contra Lezama.
   Pero bien, todo aquello es agua pasada bajo los puentes (los puentes por los cuales nuestros implacables fiscales se fueron del país, mientras los 'evadidos' estamos aquí, con la revolución). Y la revolución, liquidado el turbio episodio de Lunes, designó a Lezama director del Departamento de Literatura y Publicaciones del Consejo Nacional de Cultura y vicepresidente de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba.
   Se inicia entonces para él una etapa de intensa actividad intelectual y de reconocimiento oficial de la importancia de su obra, que hubiera sido inimaginable antes de 1959. Publica Dador, Paradiso, La cantidad hechizada.
   En calidad de homenaje aparecen su Orbita, editada por la UNEAC, su Poesía completa, por Letras cubanas, y la Valoración múltiple, que le dedicó Casa de las Américas.
   'Ya no es como antes (le escribe a su hermana Eloísa) que se publicaban los libros pagados por sus autores, cuyos pagos se hacían, como lo hacía yo y otros con la lengua fuera, con mil sacrificios y pasando innumerables necesidades. ¿Cuándo hubiera yo podido publicar una novela de más de seiscientas páginas? Esas son, en mi opinión, las cosas grandes que ha hecho la revolución...'
   Es verdad -y nunca lo hemos ocultado, en ninguna entrevista que se nos haya hecho sobre Lezama- que en los últimos años de su vida se cometieron algunos errores que en el extranjero han sido magnificados con fines contrarrevolucionarios.
(…)
   Por otra parte, su estilo libérrimo de hablar, su gusto por la frase incisiva o hilarante y su disfrute de lo imprevisible de la conversación, lo llevaban a excesos verbales que no reflejaban sus verdaderos sentimientos, ni en lo personal ni en lo político. En una palabra, había que conocerlo muy bien para no interpretarlo mal. A algunos de sus visitantes lo que realmente les interesaba era provocarlo y repetir sus frases fuera de contexto, deformadas.
   Por todas estas razones, y por la torpeza o la envidia o la ignorancia o las convicciones equivocadas que nunca faltan, las malignas acusaciones de Padilla lograron provocar, desde finales de 1972, un aislamiento de Lezama que -al contraste con la resonancia creciente de su obra en el exterior- dio pábulo a una manipulación contrarrevolucionaria de su figura que sigue hasta el día de hoy.
   Jamás Lezama se prestó a esa manipulación. Recuerdo que un día nos dijo: 'Quieren convertirme en una especie de Solyenitzin, pero yo no tengo nada que ver con eso'. Ni en los peores momentos se mostró como un enemigo de la revolución. Hizo, dentro de su estilo conversacional, los comentarios y las críticas que todos podemos hacer, pero contra la esencia y los principios de la revolución jamás se manifestó.
   Allí están, con su firma, los artículos que escribió sobre el Che y el 26 de julio, a los cuales hay que añadir Suprema Prueba de Salvador Allende, fechado en 1974.


Avance de José Lezama Lima o la nación proveniente

José Lezama Lima o la nación proveniente (Avance) from Mauricio Hernández on Vimeo.

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