El 25 de diciembre de 1999 falleció Zully Moreno, una de las mayores divas del cine argentino de su época de oro. Actuó en 33 películas en nuestro país, entre 1939 y 1955, además de filmar en México y España. Entre sus mayores éxitos se contaron "Nacha Regules", "Dios se lo pague", "La mujer de las camelias", "La calle del pecado" y "El amor nunca muere". Tras el golpe de estado que depuso al peronismo, junto a su marido, el cineasta Luis César Amadori, se exiliaron en España. Allí realizó sus últimas películas antes de retirarse en 1958 con apenas 39 años de edad.Extracto de Zully Moreno: biografía, nota de Saula Benavente publicada en Ahora, revista dominical del diario Crónica, el 16 de septiembre de 1999.
"Nació el 17 de octubre de 1920 bajo el nombre de Zulema González Borbón, en el seno de una familia humilde y trabajadora. Al cumplir los diez años sufrió el primer golpe duro en su vida: la muerte de su padre. Poco más tarde, la de su hermano mayor. Junto a su otro hermano, Alberto, unos años más chico, se vieron en la obligación de salir a trabajar para mantenerse. Aunque desde muy chiquita soñaba con ser actriz, a los catorce años el único que encontró fue el de modista. Durante bastante tiempo, cosiendo para los vecinos, logró colaborar con la economía de su hogar.
Una tarde de 1939 se enteró de que en los estudios de la calle Lima -donde hoy se levanta Canal 13- Luis Bayón Herrera estaba rodando 'Cándida', el segundo largometraje de Niní Marshall y buscaba extras. Sin pensarlo demasiado ni comentarle nada a su madre, se presentó en el set. Allí se encontró con decenas de señoritas que tenían sus mismos sueños. Su cabellera larga llamó la atención del productor, quien la encontró parecida a Ann Sheridan. La puso frente a la cámara sin decir ni una sola palabra, en una breve secuencia donde el cómico Augusto Codecá le susurraba algo al oído. Impactado por su belleza, quedaron en contacto y le prometió que le conseguiría más trabajo. Así fue. Siguieron unas pequeñas intervenciones en 'Bartolo tenía una flauta', 'Azahares rojos', y 'De México llegó el amor'. En 1941 apareció en 'Orquesta de señoritas' y fue allí donde conoció al renombrado director Luis César Amadori. Este le dio un pequeño papel y ninguno de los dos imaginaba entonces que años más tarde se convertirían en marido y mujer.
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Juntos realizaron el mayor éxito de sus carreras: 'Dios se lo pague', obra teatral de Joracy Camargo. Este filme se estrenó en marzo de 1948 y fue un gran éxito que compartieron junto a actor Arturo de Córdova, recién llegado de Hollywood. Fue la segunda película argentina que logró mantenerse cuatro semanas en la cartelera del Cine Rex (la primera había sido 'Donde mueren las palabras', dos años antes). Allí, Zully interpretaba a Nancy, una mujer rica que conoce a un enigmático hombre que jamás aparecía por las noches. Por fin descubre que se trataba de un mendigo que consiguió su fortuna apostando frente a una iglesia agradeciendo limosnas con la frase 'Dios se lo pague'. Esta historia de amor, que propugnaba la igualdad social, caló hondo en los espectadores y Zully Moreno se convirtió en una verdadera estrella para el público. El filme recorrió el mundo y hasta fue candidato a obtener el Oscar de Hollywood a la mejor producción extranjera.
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Después de afrontar un juicio donde se lo acusó de haber participado en cuestiones políticas -es decir, ser amigo de Juan Domingo Perón, quien acababa de ser derrocado-, Luis César Amadori fue encarcelado en la ex penitenciaría de Las Heras y Coronel Díaz. 'Nada incorrecto había hecho. Mi única vinculación con los hechos que se me imputaban eran mi vieja relación con un funcionario con quien compartí viejas épocas de estudiante. Felizmente todo se aclaró y el mismo presidente de la Nación firmó los papeles', expresó después de recuperar la libertad. Se refería a Raúl Alejandro Apold, propagandista del partido. Por esa antigua relación se lo acusó de haber filmado con el apoyo del Estado. Pero aunque todo estaba aclarado las cosas no podían seguir como antes. Algo se había roto y los Amadori no tardaron en tomar un avión con rumbo a Madrid, donde se instalaron en un hotel. El hombre 'de oro' del cine argentino se exilió junto a su esposa y su hijo de apenas un año del otro lado del Atlántico. Allí se enteraron de que los militares acababan de apropiarse de su departamento de cuatrocientos metros, ubicado sobre la Avenida del Libertador".
FRAGMENTO DE LA PELÍCULA "DIOS SE LO PAGUE"
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