31.3.12

Docente argentino ayunando

A 15 AÑOS DE LA CARPA BLANCA
El 2 de abril de 1997 los maestros argentinos instalaron una carpa blanca frente al Congreso de la Nación para reclamar más fondos para la educación. Los docentes sostuvieron una protesta que se extendió por más de mil días. El comienzo del reclamo, en fragmentos de Cuarenta días de ayuno y tristeza, nota de Marisa Grinstein en la revista Noticias, nº1063 del 10 de mayo de 1997.






“En un televisor instalado en la carpa donde se cumple el ayuno docente, se ven las imágenes del gobernador Eduardo Duhalde (55) inaugurando una escuela reluciente, repleta de mapas y computadoras. Juan Domingo Subia (42), maestro jujeño, mira con fascinación desde su cara oscura consumida por el ayuno. 'Es una belleza, ¿no? Pero, la verdad, si en mi escuelita nos regalaran una computadora, no la podríamos prender: tenemos luz desde las siete de la tarde hasta las once de la noche. Y a esa hora hace tanto frío que tenemos que estar en cama, tapados con frazadas'. Efectivamente: la escuela de Subia está en Coranzuli, departamento de Susques (Jujuy), a unos 4.600 metros sobre el nivel del mar, por lo que en las noches de invierno las temperaturas pueden acercarse a los 20 grados bajo cero. Subia enseña agronomía y recibe un sueldo, por jornada completa, de $ 296, a pagar cada 70 días, un 50% en efectivo y un 50% en bonos. 'La escuela se cae a pedazos, entra frío, llueve. Por suerte tenemos un televisor. Captamos un canal de Perú. Pero lo que más me cuesta es que extraño como loco a mi hijito, que vive en Jujuy, a 300 kilómetros de la escuela, donde vivo yo junto con cuarenta alumnos y cuatro maestros. Apenas puedo ir cada 20 días a verlo'.

La carpa donde los docentes cumplen su ayuno mira al Congreso. La CTERA, el gremio docente, la alquiló por tiempo indeterminado, previendo que la tirantísima relación con el Ministerio de Educación iría para largo. El 2 de abril, 51 docentes empezaron, en la carpa, la huelga de hambre. Veintisiete días después, quedaban 11 ayunantes, que tuvieron que dar por concluida su protesta por prescripción médica. Inmediatamente, otros 30 maestros iniciaron una segunda tanda del ayuno. Para levantar el ayuno -y la carpa- CTERA reclama una ley de financiamiento educativo que garantice mejoras salariales y pago en término a los docentes. Susana Decibe (48), la ministra de Educación, no quiere dar el brazo a torcer. Con cierta ironía, dijo estar dispuesta a apoyar los reclamos salariales. 'Es absolutamente posible un aumento salarial docente -dijo- siempre que esto se encuadre dentro del mejoramiento de la situación de todos los trabajadores del sector público'. 'Se burla de nosotros, como es su costumbre', contestaron desde la carpa los encargados de la organización de la protesta, mientras se distribuían los trabajos. De hecho, tener a 30 personas ayunando requiere una estructura considerable.

Rutina. Los 30 maestros que hoy por hoy están en ayuno se levantan entre las 8 y las 9 de la mañana, cuando pasa a buscarlos una combi que los lleva, para bañarse, a la Casa del Docente. Aparte, hay dos baños químicos que limpian, diariamente, algunos de los 30 organizadores de la CTERA, quienes además se turnan para comprar los diarios, barrer la alfombra gris, buscar adhesiones de solidaridad entre famosos y repartir entre los ayunantes los líquidos que tienen que tomar cada media hora, religiosamente: agua mineral, 7UP, Gatorade, mate, té y caldo. 'Hay compañeros de CTERA que se dedican, también, a la vigilancia -cuenta Alejandro Demichelis (41), secretario de Prensa del gremio docente-. Antes, la carpa estaba abierta a todo el mundo, pero hubo infiltrados de los servicios de Inteligencia. Así que ahora, para entrar a la carpa, hay que mostrar credenciales'. Desde el Ministerio de Educación, las sospechas son tomadas en broma. 'Están paranoicos -especula un colaborador muy cercano a la ministra-, A ellos les gustaría que les den tanta importancia, pero no es así. A medida que pasa el tiempo, la protesta pierde fuerza. Además, sabemos que ellos están desesperados por levantar la carpa, tienen más apuro que nosotros'. Las elucubraciones de los funcionarios llegaron a los oídos de los docentes. 'Es una infamia más, y no nos extraña. Nosotros no vamos a levantar el paro hasta que salga la ley de financiamiento educativo -se arriesga Demichelis-. Pero desde el ministerio no hay voluntad de arreglo. Por algo Decibe recibió los huevazos'.

Incidentes. Los famosos huevazos a los que se refiere el dirigente de CTERA son los que Decibe recibió durante un acto en San Luis. El apuro de los preparativos le hizo descuidar un detalle que para los puntanos no había pasado inadvertido: el gobernador Adolfo Rodríguez Saá (49) había dejado en disponibilidad, tres meses antes, a casi cuatro mil maestros. Poco después, la ministra se quejó públicamente, y acusó a Marta Maffei (56), titular de CTERA, de 'generar conflictos en lugar de trabajar para construir la educación'. (…) 'Desde 1993 e incluido las inversiones de 1997, este ministerio habrá cumplido con una inversión de 1480 millones de pesos', responde Decibe. 'En mi provincia, de ese dinero, me parece que no nos llegó nada -reflexiona Roberto Díaz (35), docente rionegrino en ayuno desde hace una semana. Yo ya había ayunado en Viedma durante 14 días. Ahora estamos pidiendo un fondo de 500 millones, para revertir en parte la crisis'. Díaz no explica mucho más: admite que el ayuno le hace perder la concentración y que parte de sus pensamientos se le van en imaginar comida y en ver pasar a los legisladores trajeados en camino hacia sus despachos. Acostado en su colchón, Subia, el maestro de Jujuy, anota cada detalle de su ayuno porteño. 'Lo último que anoté es lo del peso: yo fui el único que en los primeros días no bajó ni un gramo. Y les dije que era así porque estoy acostumbrado, porque allí de donde vengo, a veces pasamos días sin tener qué comer'.

Las cifras de la crisis (recuadro)
La mayoría de los docentes gana entre $200 y $350.
El 14% de los chicos entre 5 y 17 años no va a la escuela.
Porcentaje de analfabetismo: 4% (en 1980 era del 5%).
El 5,6% de los alumnos primarios repitió de grado. También el 8,4% de los secundarios.
El 19,5% de la población tiene primaria incompleta y 18,9% tiene secundaria incompleta.
Presupuesto educativo total: 10.452 millones (en 1992 era de 7.248 millones).”

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