El lunes 3 de diciembre de 1990 comenzó el último levantamiento de los carapintadas, el sector ultraderechista del Ejército que lideraba Mohamed Alí Seineldín. Luego de los sucesos de 1988 y 1989, éste fue el intento final de imponer sus reclamos. Crónica de la jornada en Todo empezó con sangre..., nota de Alejandra Rey y Luis Majul en la edición extra de la revista Somos del 5 de diciembre de 1990.
“Sólo tres horas de combate le llevó al general Martín Balza, subjefe del Estado Mayor del Ejército, terminar con el levantamiento del Regimiento I de Infantería de Patricios. Fue entre las 16 y las 19, con fuego de artillería pesada, desde cuatro frentes distintos con tropas y tanques provenientes del Regimiento III de La Tablada.
Los sucesos comenzaron a las 5.45 de la mañana cuando el mayor retirado Hugo Reynaldo Abete ingresó, disparando, por la entrada de la Avda. Bullrich. Más tarde el teniente primero Bianchi relataría a Somos los sucesos. ‘Entraron desordenadamente y desalojaron a algunos. El teniente coronel Pitta, el mayor Pedernera y el cabo primero Morales quisieron dialogar, pero les dispararon. Los tres murieron’.
6.30: Intentan ingresar, pero son repelidos, los oficiales de franco. Uno de ellos cuenta que las posiciones de los carapintadas son perfectas. ‘Para sacarlos van a tener que tirar los edificios’.
7.30: Busca entrar el teniente coronel Antonio Igounet, edecán de la Presidencia y arquero del combinado de Casa de Gobierno. Los militares a cargo de la situación lo hacen desistir.
8.15: El padre de un conscripto decide entrar a buscar a su hijo. Desde adentro le contestan con disparos.
8.30: El mayor Abete da una conferencia de prensa. ‘Esta es la continuación de Monte Caseros porque no podemos permitir que un militar sea taxista o diariero. Tendríamos que estar las 24 horas defendiendo a la patria. Esto no es un golpe de Estado; nosotros respetamos la Constitución pero desconocemos al generalato. El comandante legítimo del Ejército es el coronel Mohamed Alí Seineldín’.
8.40: Ingresa, en una camioneta, un capitán y es baleado. Su chofer muere por heridas en la cabeza. El propio capitán lo retira en otra camioneta.
15.00: Llega el general Balza en un helicóptero que aterriza en el campo de polo de Remonta y Veterinaria. Su metro noventa sobresale del jeep que lo traslada hasta el regimiento. De fajina sin casco, FAL en mano, comienza a impartir órdenes a las fuerzas que, rápidamente, toman posiciones en las inmediaciones. El grueso de la artillería lo hace en los talleres que Subterráneos de Buenos Aires tiene en Cerviño y Avda. Bullrich.
16.00: Tres VCTP (Vehículo de Combate y Transporte de Personal) y tres tanques de La Tablada se acercan al regimiento.
16.15: Empiezan los combates. Por Cerviño y desde los Talleres de SBA un cañón de 40 mm hace fuego sobre los edificios del regimiento. desde debajo del puente del Ferrocarril General San Martín otro cañón habre (sic) un boquete en la reja de entrada. El general Balza se pasea, sin casco, por las inmediaciones dando órdenes. Una de ellas es que los tanques avancen hasta la puerta de entrada.
17.30: Después de una breve tregua y, habiendo tomado posiciones en los paredones del regimiento, se inicia un bombardeo desde los cuatro frentes: Luis María Campos, Dorrego, Bullrich y Cerviño. Comienzan a salir los primeros rebeldes rendidos que, curiosamente, son saludados por las fuerzas ‘leales’.
18.30: El fin de Abete está muy cerca. Las fuerzas leales ya están dentro del regimiento. Se escuchan disparos en el interior. Los mirones ya están en la puerta y piden ‘paredón’ para los que combatían. Los sediciosos, brazos en alto y sin calzado, son transportados en un camión, mientras en el Hospital Militar Maldonado, dentro del mismo premio, los rebeldes deponen armas.”
El último levantamiento militar carapintada
.
Leer más
0 comentarios:
Publicar un comentario