Hace poco más de diez años la Argentina atravesaba una situación similar a la actual: el temor a una epidemia de dengue. A continuación, transcribimos una nota publicada por el diario Perfil, sobre la expansión de la enfermedad en 1998.
El mosquito Aedes aegyptii está instalado en nuestro país, y con él, el dengue. En el Congreso Argentino de Zoonosis y de Enfermedades Emergentes del mes pasado en Buenos Aires, el biólogo Nicolás Shweigmann mostró lo cerca que estuvimos –y volveremos a estar- de una epidemia argentina. Concretamente, a dos cuadras. Fue la distancia que separó a mosquitos porteños sanos de un hombre enfermo.
La preocupación porque los mosquitos no contraigan el dengue no tiene que ver con un ecologismo extremo, sino con una realidad sanitaria: hay demasiados. En la ciudad de Tartagal, provincia de Salta, más del 65 por ciento de las viviendas ya albergaban al Aedes Aegyptii, en el mes de marzo. En algunos lugares de Jujuy, los niveles de infestación alcanzan hoy el 90 por ciento y en Misiones, el 78. Los indicadores de abundancia superan en muchos casos los valores límite que marca la Organización Mundial de la Salud para declarar riesgo de epidemia.
Fragmento extraído del diario
Perfil del 12 de mayo de 1998
Leer nota original
[+/-]
0 comentarios:
Publicar un comentario