Fútbol

A TRES DÉCADAS DEL DESCENSO DEL CICLÓN

El 15 de agosto de 1981 San Lorenzo perdió la categoría al ser derrotado por Argentinos Juniors (1 a 0) en la cancha de Ferro. Con el Viejo Gasómetro clausurado y una deuda millonaria, el conjunto de Boedo derrumbó aquel día el mito de que los clubes grandes no podían descender. El recuerdo del hecho en la crónica Por qué se fue, publicada en la revista SOMOS el 21 de agosto de 1981.

Por qué se fue
"Al cabo de 66 años en primera división, San Lorenzo -uno de los cinco grandes- se fue a la B con un club debilitado y una deuda de 2.500.000 dólares.
La cancha de Ferro ya es un símbolo en la historia de San Lorenzo: allí trepó a primera A el 1º de enero de 1915 cuando derrotó por 3 a 0 a Honor y Patria. Allí se fue a la B el sábado pasado en medio del llanto de los jugadores, la desesperación de la hinchada y el asombro de todo el mundo. Cuando el árbitro Espósito levantó los brazos y anunció el fin del partido (1 a 0 a favor de Argentinos Juniors) murió un mito: el que decía que los clubes grandes (Boca, River, Racing, Independiente y San Lorenzo) no pueden descender.
Mientras la tribuna de Argentinos quedaba afónica con un se van para la B, se van para la B, la de San Lorenzo era una lágrima. Que a un equipo de la talla de El Ciclón le cueste asumir el descenso es comprensible: lo avalan una historia y una tradición triunfadora de de 73 años (...) ´El ´74 fue el último año glorioso para los azulgranas -dijo a SOMOS un avezado comentarista-. Después de ganar el Nacional, y debido a luchas internas en la Comisión Directiva, se desmanteló el competitivo plantel que tantos triunfos había cosechado. Junto con el técnico Osvaldo Zubeldía se fueron, en el ´75, Ortiz, Telch, Chazarreta, Scotta (el único jugador argentino que hizo 60 goles en un año), Doria, Cocco, Glaria, Rosi, Beltrán y Piris. De ahí en más San Lorenzo nunca consiguió formar una escuadra de nivel, capaz de pelear los primeros puestos´.
La política de comprar jugadores veteranos, de dudoso pedigree y, generalmente, defenestrados de otros clubes, es -según muchos- responsable de la debacle, junto con la accidentada vida institucional y deportiva de San Lorenzo. Cuano se fue el técnico Carlos Bilardo, a fines del ´79, moisés Annán, por entonces presidente, hablaba de contratar a Menotti y comprar a Maradona. Finalmente se conformó con Delem, que duró unos pocos meses y fue reemplazado por Carmelo Faraone. La administración Bonina-Larrandart puso el plantel en manos de Victorio Cocco y compró a Delgado, Ceballos y varios veteranos (Suñé, Larrosa, Scotta, Glaría, Capurro). Pese a algunos resplandores iniciales, el equipo empezó a desfallecer al promediar el Metro y Cocco renució después de la derrota de 1 a 0 frente a Huracán, el 24 de junio pasado. La breve campaña de Juan Carlos Lorenzo no fue más feliz: de ocho partidos sólo ganó uno (2 a 1 contra River). ´San Lorenzo se fue a la B y lo tiene merecido -dijo Reinaldo Martino-. Si hubiera tenido jugadores de jerarquía no habría pasado por ese trance. La mala conducción y la ineficacia de las últimas comisiones directivas llevó a San Lorenzo al pozo. Políticamente, hay demasiadas agrupaciones dentro del club, que se pelean siempre y nunca aportaron nada´.
La historia clínica de San Lorenzo hoy es ésta: perdió grandes jugadores, perdió un estadio (el de Avenida La Plata, que está clausurado), perdió la categoría y debe 2.500.000 dólares. Seguramente, y como primera medida, venderá el Gasómetro. Después, ajustará las clavijas para recuperar, el año que viene, el prestigio perdido."

Video - San Lorenzo, el descenso


.

Leer más